Durante esta noche Melchor, Gaspar y Baltasar han acudido a todos los hogares para dejar sus regalos mientras los pequeños han dormido con la ilusión de que llegase la mañana para poder abrirlos y disfrutar con ellos en compañía de sus familias. Pero antes, en la jornada de ayer, los Reyes Magos visitaron todos los municipios del Valle del Genal de una forma distinta a la habitual, ya que la crisis sanitaria provocada por el Covid-19 ha impedido la celebración de las tradicionales cabalgatas.
     En algunos pueblos, durante buena parte del día Sus Majestades fueron caminando casa por casa para visitar a los vecinos, repartiendo de manera individualizada roscones, material escolar, caramelos, mochilas o material de protección, pero sobre todo magia e ilusión entre pequeños y mayores. En otros casos se han organizado “cabalgatas estáticas” para facilitar la llegada escalonada de los niños, evitar aglomeraciones y cumplir todas las medidas de seguridad. En Cartajima se mantuvo el tradicional reparto de regalos en la iglesia y, además, Siete Pilas y Salitre, diseminados de Benalauría y Algatocín respectivamente, también pudieron disfrutar de la presencia de los Reyes Magos.
     Sus Majestades de Oriente han pedido a todos continuar actuando con responsabilidad para frenar la pandemia y han lanzado un mensaje de ánimo y esperanza ya que, a buen seguro, el próximo año todos viviremos las fiestas en condiciones más normales y con la misma intensidad de siempre.